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Tiempo de lectura: 20 minutos
Público objetivo: Público en general
Nivel: Básico
Fecha publicación: 11 de Noviembre del 2022
Hola a todos, nos encontramos de nuevo para hablar de un tema sumamente importante en nuestra vida diaria: las redes sociales. Todos los días sacamos nuestro tiempo para ver lo que está sucediendo en el mundo a cada rato. Por ejemplo: La cantante Belinda, que terminó con su último novio, la serie que está de moda (Grey’s Anatomy) ha sido renovada para una nueva temporada, o de que nuestra tienda de ropa favorita (Zara) está en descuento y aprovechamos el fin de semana para comprar prendas y armar outfits. Pero bueno, esta vez vamos a hablar de los peligros que conlleva el mal uso de las redes sociales y las consecuencias que pueden traer si no hacemos un mejor uso de ellas.
Cada uno de nosotros tenemos nuestro grupo de amigos para jugar, trabajar, estudiar, compartir, celebrar, entre otras cosas. Pero la gran parte de amigos que tenemos en redes sociales son desconocidos que no sabemos nada sobre ellos. Por lo tanto, si alguna vez nos llega un mensaje de un perfil desconocido procuremos no darle información personal ya que la pueden usar para beneficio de ellos, pero a la vez perjuicio para nosotros, y así evitar que nos chantajeen o nos amenacen para no caer en su juego sucio.
En cuanto publicas una imagen en las redes sociales, ésta escapa a tu control. Eso quiere decir que, si no tienes cuidado, cualquiera puede verlas y usarlas, Por si fuera poco, a veces los derechos de la imagen pasan a ser propiedad de la plataforma. Para que nunca te pase esto debes informarte sobre las políticas de los sitios a los que subas tus fotos (qué derechos tienen sobre tus imágenes), revisa tus opciones de privacidad para ver quién puede tener acceso a ellas y evita subir imágenes demasiado personales o comprometedoras.
El acoso en las redes sociales es uno de los flagelos de Internet. Los acosadores utilizan la sensación de impunidad que brinda Internet para hacer miserable la vida de sus víctimas. Es un problema que afecta a personas de todas las edades, no solo en los niños que es donde más se presenta, sino también en los adolescentes y jóvenes. Para salir de esto lo mejor es denunciar y mantenerse unos días alejado de las redes sociales hasta que pase la tormenta.
La gente no sabe que todo lo que dice en las redes sociales puede tener repercusiones legales. Facebook o Twitter son extensiones del mundo real, así que lo que es delito fuera también lo es allí. Debemos tener mucho cuidado con insultar, difamar o difundir rumores.
En relación con la mencionada adicción a las redes sociales, al conocer constantemente sus cuentas en ellas, los niños y adolescentes pueden perder el tiempo que pasan en la escuela o con su familia. Este es un problema al que también se enfrentan los adultos cuando cambian la escuela por trabajo; Eso sí, en alguna ocasión has dicho “quiero mirar algo en Twitter durante cinco minutos” y cuando te das cuenta ya ha pasado casi una hora.
Sexting es una práctica que involucra a dos personas hablando sobre contenido sexual, a menudo compartiendo imágenes de contenido sexual, generalmente a través de una aplicación de mensajería instantánea como WhatsApp o Telegram.
Aquí existe el riesgo de que uno de los participantes compartan estas fotos con otros sin su consentimiento, posiblemente llegando a los adolescentes. Evidentemente, como decíamos, compartir fotos personales sin permiso es un delito, pero por mucho que denuncies, el daño ya está hecho.
Además, este no es el único peligro, pues estas imágenes y textos de conversaciones pornográficas también pueden convertirse en material de chantaje, como veremos en el siguiente punto.
Limitar el uso de las redes sociales por parte de los menores ayuda a evitar muchos de los peligros aquí expuestos. No se trata de prohibirlos, se trata de cuándo se usan y cómo se usan. Para ello, puedes utilizar varias aplicaciones de control parental que te permiten decidir cuándo se usa tu teléfono o aplicación, o estar presente cuando acceden y usan Internet (aunque esto puede ser más complicado).
Es recomendable usar una contraseña segura y fuerte ya que garantiza de que virtualmente nadie podrá acceder a nuestro perfil en la red social. Por ello, hay que crear contraseñas complejas y con caracteres al azar. Emplea una contraseña diferente para cada perfil o cuenta en red social y evita usar fechas significativas, números del DNI o cualquier otro dato relacionado contigo.
Otro gran riesgo en las redes sociales que no podemos pasar por alto son los llamados “challenges” o retos, ya que algunos de ellos pueden ser muy peligrosos e incluso poner en peligro la vida de los menores, mientras que otros pueden incluso derivar en algún tipo de delito.
Muchos de estos desafíos ya están en las noticias y es posible que haya oído hablar de ellos, por ejemplo, el desafío final de la “Ballena Azul” es el suicidio.
Como conclusión, las redes sociales son un gran avance de la tecnología, gracias a las cuales podemos hacer infinidad de cosas. También, hemos podido comprender que estas plataformas digitales no siempre son buenas y en ocasiones implican un riesgo considerable. Redes como Instagram, Facebook o Twitter son un buen sistema para delincuentes como secuestradores, traficantes de blancas, estafadores, etc. Por lo tanto, si las usamos de manera incorrecta, se pueden convertir en una enfermedad o en una adicción, desvelar a los jóvenes, ver cosas inapropiadas, quitar tiempo para hacer otras cosas más productivas o para hacer sus deberes de colegio o de universidad, e incluso llevarlos a cometer errores de los cuales se puedan arrepentir tarde o temprano como los challenge que se ven en Tik Tok o Instagram que afectan a su salud mental y física. Es por eso, que debemos usarlas de una mejor manera y aprovecharlas para otras cosas, como leer libros, ver documentales o también para uso académico.
Autor: Juan Camilo Betancur Acevedo
